No es concebible imaginar hoy día el que alguna actividad productiva no utilice recursos informáticos, no importa la razón, simplemente el desasociar la computadora de la vida presente es algo que ni siquiera se considera o piensa, la computadora es simplemente la herramienta diaria de mayor uso a nivel global. Los puristas podrán decir que el teléfono inteligente es realmente el dispositivo de mayor uso, y es verdad, pero la concepción de la computadora sin importar el formato (teléfono, Tablet, reloj, etc.) es a lo que me refiero.

La industria de la construcción es para la mayoría de los países un motor económico, si esta industria crece, la economía en relación también lo hace, y si por el contrario cae, es claro indicativo de que las cosas andan mal. Sin embargo, hoy día existe una alta necesidad de que a pesar de que la economía no ande bien, la industria de la construcción se mueve, no necesariamente en el área de infraestructura, pero si en el área de la vivienda y de la remodelación y mantenimiento. Y es precisamente cuando el uso del computador se está convirtiendo no solo en la herramienta multifuncional sino, en un generador de beneficios que en suma impactan en la satisfacción de los usuarios.

Se habla mucho de la transformación digital, inclusive de la sociedad digital, y esto lo podemos constatar a través de nosotros mismos. Estadísticas nos muestran que al menos 2 de cada 3 usuarios de internet en el mundo tienen un promedio de 3 identidades digitales que se asocian a igual número de redes sociales, donde cada una de ellas se convierte en una comunidad donde sociabilizamos bajo un orden cívico que nadie nos enseñó, es decir, intuitivamente aprendimos el uso de las aplicaciones, imitando o intentando, y como resultado hemos visto como digitalmente trasladamos nuestros mismos vicios y virtudes desde la vida terrenal.

Sin embargo, cuando hablamos de beneficios, la historia cambia y se vuelve extraordinariamente positiva y productiva. Transacciones bancarias, compras de diversos tipos, consultas, tramites gubernamentales, educación, capacitación, seguridad, son apenas unas cuantas menciones de la inmensa variedad y cantidad de servicios a nuestra conveniencia la era digital nos ofrece. Es aquí donde nace el verdadero significado de la transformación digital, la cual no es solamente la automatización de procesos o sistemas, sino que lo es con el único propósito de que genere un beneficio directo medible y amplio a los usuarios y con un impacto de mayor rentabilidad para las empresas y prestadores de servicios y productos.

En este contexto es que los profesionales de la industria de la construcción deben orientar su esfuerzo digital al beneficio directo de sus clientes, donde la preferencia de los mismos y su habilidad para mejorar procesos y ahorrar recursos, les dará como resultado mayores dividendos. A continuación, doy tres ejemplos donde la transformación digital tiene un alto impacto en el sector construcción:

• Desde el punto de vista de precisión y cumplimiento, la construcción es de las industrias peores calificadas, el no cumplir en tiempo y presupuesto es una práctica común que impacta negativamente en el usuario. La transparencia en el detalle del presupuesto es un generador de confianza impresionante. Cuentas claras es como mejor podemos definirlo y es aquí donde al nacer un proyecto con una sólida base de datos manipulada por un sistema de costos genera la información necesaria para compartirla y platicarla con el cliente. Imagine que su cliente reciba en su celular todos los dias el avance de la obra y que cada semana tenga acceso a ver el detalle de gastos y en su caso la razón de los cambios de precios. Esta práctica aparentemente es propietaria de grandes corporativos y requiere grandes recursos, esto no es más así, hoy día se cuenta con la tecnología a la escala adecuada de tamaños y necesidades y puede ser utilizada hasta en un simple proyecto de mantenimiento o remodelación habitacional.

• El poder de la simulación digital le ayuda a generar más ideas que nunca, con el simple uso de sistemas de diseño arquitectónico y estructuras. ¿Cuántas opciones discutió con su cliente? ¿Probó mejorar el diseño cuidando el que no se desviara del presupuesto? ¿Por qué no incorporar elementos de beneficio directo a sus clientes desde la concepción de la obra, donde todo resultara más sencillo de instalar y de considerar, como lo sería por ejemplo un sistema de cámaras de videovigilancia? Hoy usted lo puede hacer tan solo creando mejores espacios de uso y vida para sus clientes.

• Economía. Reducir el desperdicio y seguir paso a paso los procesos constructivos tiene su premio en la parte de tiempo y economía. ¿Cuántas veces ha tenido que romper elementos constructivos porque se olvidó colocar un ducto? ¿Por qué fabricar más mezclas de las que se van a usar en ese momento? Al parecer esto es parte de un proceso de supervisión en sitio, pero con la herramienta adecuada de captura de incidencias con datos e imágenes, se generar automáticamente una cultura de la calidad que redundará en lo dicho anteriormente.

La era digital llego y permanecerá por el resto del tiempo, depende de ustedes entrar a ella o quedarse al margen, pero les aseguro que si no entran, será preferible que se dediquen a otra actividad, en esta solo estarán apostando a perder.

Autor: Humberto de la Vega López